Pescando en Milton Keynes (2/3): más lagos urbanos.
El tercer día decidimos quedarnos en el lago que habíamos pescado el día anterior. La subida de las temperaturas y la actividad que habíamos visto el día anterior nos hizo ir sobre seguro. Paul estaba convencido que conseguiríamos coger alguna brema. Sabíamos que, al menos, gardones y percas estaban moviendose en dicho lago.
Teardrop lakes es un parque situado dentro de Milton Keynes. Realmente es un sistema de 4 pequeñas presas encadenadas creado como "estanque de tormentas" para evitar inundaciones en caso de fuertes lluvias. En situación normal, su apariencia es la de 4 pequeños lagos rodeados de arboles y grandes praderas de cesped. Un parque idílico con niños jugando, oficinistas comiendo un sandwich y montones de gente corriendo, paseando al perro o simplemente haciendo deporte.
En dichos lagos podemos encontrar gardones, bremas, tencas, percas, unas pocas carpas de gran tamaño y algunos "ide" de diferentes colores.
En este tercer día mi planteamiento fué similar al del día anterior: caña de inglesa, hilos finos, flotadores pequeños... Paul, en cambio, decidió pescar con caña enchufable. La curiosidad es que su enchufable no es como las que estamos habituados a ver aquí. Era una caña de 7 metros finísima, sin elástico (pelo de ballena en su lugar) ideada para pescar gardones y otros "silver fish". Como podéis imaginar, muy agradable de utilizar.
Paul pescó con una caña enchufable sin elástico. |
Cañamón, mash bread y gusanos rojos. |
Pasadas un par de horas cambiamos al gusano rojo con la esperanza de clavar algún grandote pero... no contábamos con las percas. Al cebar con algunos tiradores de gusano rojo habíamos "invitado" a todas las percas del lago a venir. Con gusano rojo era realmente fácil coger las pequeñísimas percas que se habían apoderado del pesquil. A mi no me importaba ya que es un pez que me gusta bastante pero entiendo que puede ser un poco frustante.
Volvimos a anzuelar el pan y cambiamos un poco la presentación. Si antes pescabamos a ras de fondo o unos centímetros por encima, ahora decidimos apoyar la mitad del bajo y buscar una presentación más estática. Algunos gardones de buen tamaño tomaron nuestro engaño hasta que llegaron las bremas.
La primera brema de buen tamaño de nuestro viaje. |
Las picadas de las bremas (o "skimmers" cuando su tamaño es pequeño) eran mucho más lentas y mucho más sostenidas en el tiempo. La lucha que ofrecían cuando las traíamos a la orilla no era una maravilla. Los ejemplares grandes utilizan su cuerpo como si fuese una vela para aponerse a la dirección en la que las traes. No disponen de fuerzas para nadar hasta el otro extremo del lago y no desarrollan gran velocidad. Simplemente utilizan su volumen para evitar llegar a la orilla. Como supondréis, los ejemplares pequeños vienen mansamente a la orilla y no suponen esfuerzo para el pescador.
Pescamos hasta que las bremas decidieron salir de nuestros pesquiles y las percas retornaron para "encargarse" de los gusanos que caían. Fué una buena jornada donde, por fin, sacamos los peces que tanto esperábamos.
Al final de la tarde Paul nos llevó de
visita turística. Nos dirigimos al norte de Milton Keynes a visitar una zona con numerosas esclusas en
el canal. Las esclusas son una especie de compuertas que se utilizan para que los barcos
puedan para salvar desniveles. Muy cerca de la zona de las esclusas también
pudimos observar como el canal se adentraba en un túnel.
Disfrutamos de algunos ratos de sol y de algunas buenas bremas. |
Habíamos tenido un gran día de pesca en el que habíamos aprendido muchas cosas nuevas y conseguido capturar algunos peces diferentes con cebos no habituales en España... ¿Qué nos encontraríamos al día siguiente pescando en un pequeño canal inglés?
Texto: Daniel Porto. Imágenes: C. Rubio y Daniel Porto.
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