Os dejo unas fotos de una corta sesión de pesca. Algo menos de 3 horas de pesca en el embalse de San Juan. Esta vez con Juanan, un compañero que llevaba una larga temporada sin coger las cañas. Ya era hora de que volviese a tirar unas picadas y sintiese algún pez al otro lado del sedal.
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| Tarde de calor con los pies a remojo... |
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| Tarde de verano: pesca y tranquilidad. |
Nos desplazamos a media tarde hasta una de mis zonas preferidas de este escenario madrileño. Buscamos una zona de arena con un fondo más o menos uniforme y decidimos pescar a 12 -15 metros de la orilla con pequeños flotadores. Utilizamos equipos ligeros e hilos finos más finos de los habitual debido a que las aguas estaban realmente transparentes. Como cebo utilizamos algo típico para el barbo en este embalse: gusano blanco.
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| Pequeños pero peleones. |
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| ¡Captura y Suelta! |
Conforme avanzaba la tarde fuimos reduciendo la profundidad de nuestros aparejos hasta pescar con apenas 1 metro de profundidad. Los barbos de este embalse tienden a subirse a medias aguas. Además se movían inquietos cerca de la superficie y las picadas eran muy rápidas. La verdad es que fallabamos la mayoría de las veces que nuestro flotador se hundía.
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| 100% pesca de verano. |
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| El barbo más grande de la jornada. |
Hoy en día todavía me sorprendo con rincones como estos. El embalse de San Juan, a veces llamado "playa de Madrid", situado cerca una aglomeración urbana de millones de personas y con una afluencia de gente tremenda, se conserva con aguas transparentes, con un entorno espectacular y con unos peces magníficos. ¡Que siga así por muchos años!
Fotos: Juan Antonio M. y Daniel Porto. Texto: Daniel Porto.
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